La Costa Quebrada es uno de los paisajes más excepcionales y auténticos de Cantabria. Está enclavada entre la bahía de Santander y Puerto Calderón, y se extiende por 8 municipios cántabros: Santander, Camargo, Piélagos, Santa Cruz de Bezana, Miengo, Polanco, Suances y Santillana del Mar. Aquí encontraremos una impresionante fusión de encantadores acantilados con sus frondosos bosques. Tiene las playas más resplandecientes con arena dorada, bordeadas de dunas que descienden en cascada hasta las flechas litorales y tómbolos (bancos de arena que conectan un islote con la costa).
Somo, la joya de Cantabria.
Mientras serpenteamos por sus impresionantes senderos en lo alto de sus imponentes acantilados, al otro lado de la bahía de Santander, justo en el medio de los acantilados de Loredo, se encuentra esta playa paradisíaca de unos 4km de arenal primoroso que enamora a locales y viajeros. Convertido en uno de los destinos estivales más apreciados de Cantabria, la playa de Somo es también la cuna del surf cántabro.
EL PARQUE NATURAL DE LAS DUNAS DE LIENCRES
La exploración de la Costa Quebrada puede comenzar por su extremo occidental u oriental para realizar un viaje lineal clásico. Si viajamos hacia el oeste, la primera vista será la del Parque Natural de las Dunas de Liencres. Conducir hasta allí permite contemplar la desembocadura del río Pas, pero para disfrutar de este paisaje costero en todo su esplendor es necesario subir a la montaña de La Picota, de 240 metros de altura, desde donde se puede disfrutar de una de las panorámicas más impresionantes de la Costa Quebrada
Al volver al nivel del mar, un frondoso pinar nos recibe a pocos kilómetros de las playas de arena y las dunas de Liencres. Este majestuoso crecimiento no es natural, sino que se plantó a mediados del siglo pasado para estabilizar unas dunas errantes que se desplazaban rápidamente hacia el interior.
En un corto descenso por el terreno inclinado de las Dunas de Liencres, te esperan dos playas: Valdearenas (la más grande) y Canallave. Sus arenosas orillas están bordeadas por un mar de color esmeralda, alimentado por el incesante flujo y reflujo de las mareas del Cantábrico. El parque natural está abierto a los visitantes todo el año, pero cobra vida durante el invierno, especialmente para los apasionados de la observación de aves; muchas especies pasan por aquí de camino a zonas más cálidas de nuestro planeta.
ATARDECERES INOLVIDABLES
Un pintoresco sendero a lo largo de la Costa Quebrada permite a los viajeros atravesar desde Valdearenas y Canallave, serpenteando a través de El Madero antes de llegar a Somocuevas, conocida como una de las playas más impresionantes de esta costa. Más abajo se encuentra Portío y La Arnía, una impresionante playa conocida en toda España que domina los glamurosos Urros de Liencres, con sus irregulares formaciones rocosas que crean serenos canales entre ellas y la costa. Para disfrutar de un gran atardecer, basta con buscar uno de los muchos salientes rocosos que nos brinda este tramo de costa que se extiende entre las dunas de Liencres y La Arnía.
LA ISLA DE LA VIRGEN DEL MAR
En honor a su patrona, la Virgen del Mar, es uno de los lugares más especiales y secretos de esta ciudad. Fue en el siglo XV que comenzó a construirse la capilla situada en el centro de esta pintoresca isla. La pueden encontrar al entrar en la ciudad de Santander, en la parte oriental de la Costa Quebrada, verás la isla Virgen del Mar. A esta isla se accede a través de un puente cuando hay marea alta y por la playa durante la bajamar. Además de admirar la capilla, hay que deleitarse explorando los dramáticos acantilados con playas escondidas que aparecen o desaparecen debido a los cambios del nivel del mar.
EL FARO DE CABO MAYOR.
Al finalizar nuestro viaje por la hermosa Costa Quebrada Cántabra, la playa de La Maruca será nuestra última parada antes de llegar al faro de Cabo Mayor. Esta emblemática estructura data de principios del siglo XIX y se alza con su majestuosa silueta blanca sobre un acantilado que recuerda en su forma a un tobogán, lo que la convierte en una de las atracciones turísticas más populares de Santander. No se pierda el encantador paseo desde la playa de El Sardinero para llegar hasta allí. En la actualidad, este singular paraje incluye un centro de arte que alberga tres salas de exposiciones diferentes para disfrute de los visitantes.
Y así termina nuestro itinerario por la Costa Quebrada, una obra de arte que la naturaleza ha esculpido, tras el paso de millones de años, una costa que impresiona a todo el que la conoce.